El ministro de Justicia, Francisco Caamaño, ha negado hoy que el Gobierno haya sugerido al Tribunal Constitucional (TC) que admita algunas listas de Bildu a las elecciones del próximo 22 de mayo, lo que, en su opinión, "es un rumor absolutamente infundado".

"El Gobierno ha hablado ante los jueces exclusivamente a través de los recursos que presenta la Abogacía del Estado", ha añadido Caamaño, en una entrevista en RNE, en referencia a las últimas declaraciones de algunos dirigentes del PP.

El ministro además se ha mostrado sorprendido por el hecho de que "se puedan hacer afirmaciones de otro tono que sólo hacen contaminar el prestigio de las instituciones democráticas y poner en duda la independencia de nuestro sistema judicial".

También ha dicho que él no ha hablado ni con el presidente del TC, Pascual Sala, ni con los magistrados de la Sala del 61 del Tribunal Supremo (TS) que ha prohibido a las candidaturas de Bildu concurrir a las elecciones del 22 de mayo por considerar que responden a un pacto para permitir a Batasuna-ETA volver a las instituciones.

Estas acusaciones, según ha dicho, "son la mejor forma de fijar una posición de presión" y "eso sí que es intentar influir sobre los Tribunales de Justicia y algo que un demócrata nunca debería hacer".

El ministro de Justicia ha pedido que no se intente presionar desde el exterior al TC en su decisión sobre Bildu, la cual será responsabilidad no del Gobierno, sino de este Tribunal, que es el guardián de la Constitución y de los Derechos Fundamentales.

Según ha declarado, es bueno que ahora el Constitucional tome en Derecho su decisión sobre el recurso de Bildu contra la sentencia del Tribunal Supremo.

El titular de Justicia ha asegurado que normalmente la aritmética progresistas/conservadores en el Tribunal Constitucional "se nos ha demostrado como una aritmética fallida", ya que cada magistrado responde de sí mismo y ante su propia conciencia.

"Yo estoy convencido de que van a actuar así, no por alineaciones pretendidas", ha agregado respecto a los magistrados, cuya decisión, según Caamaño, tendrá que estar razonada en Derecho porque será leída no sólo por juristas y por la sociedad española, sino por otros Tribunales como el de Estrasburgo.

Según ha asegurado, unos magistrados tienen una forma de entender la vida y el Derecho determinada que se podría denominar más conservadora y otros tienen otra visión distinta, pero "al final van a decidir en conciencia".

Una vez que el TC dicte una sentencia sobre Bildu lo importante en opinión del ministro es que esta resolución sea acatada.

"Estoy convencido de que todos los socialistas, guste más o menos, acataremos la sentencia", ha añadido Caamaño, quien ha hecho hincapié en que le gustaría "tener una buena sentencia" y que "la Ley se cumpla".

Este asunto, según ha recordado, tiene muchas connotaciones políticas porque se trata de unas elecciones, pero a la par tiene una complejidad jurídica "sumamente interesante" y "muy compleja".

Acusaciones del PP

La secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, ha considerado hoy "intolerable" que se pretenda presionar al Tribunal Constitucional en la decisión que tiene que adoptar sobre la coalición Bildu y su concurrencia a las elecciones del 22 de mayo.

Así lo ha manifestado De Cospedal en un desayuno informativo organizado por el diario "El Economista" al ser preguntada por algunas informaciones que apuntan la posibilidad de que miembros del Gobierno estén intentando presionar al TC.

También ha sido preguntada por las declaraciones del vicesecretario de Comunicación del PP, Esteban González Pons, quien se mostró preocupado por que el Gobierno "esté trasladando la sensación" de que controla el Constitucional.

"Es intolerable que se pretenda presionar" al TC, ha dicho la número dos del PP antes de expresar su confianza, "porque es lo lógico, tiene sentido común y obedece a la lógica jurídica", en que el Constitucional ratifique la decisión del Tribunal Supremo de prohibir a Bildu su concurrencia a las elecciones.