Veinte personas han muerto durante el primer fin de semana de la Operación Especial de Tráfico de agosto en dieciocho accidentes mortales, en los que otras veinticuatro han resultado heridas, diecisiete de ellas graves.

Según la Dirección General de Tráfico (DGT), de los fallecidos en estos siniestros, ocurridos entre el viernes a las 15:00 horas hasta la pasada medianoche, cuatro eran motoristas y dos circulaban en bicicleta.

De los 18 accidentes, nueve han sido salidas de vía, siete colisiones, y un vuelco en la calzada.

Respecto a los motivos, la mitad se han producido por distracción del conductor, cinco por velocidad inadecuada, dos por alcoholemia y el por otras infracciones.

En lo que va de año, se han contabilizado 945 muertos. En el acumulado anual hasta el 31 de julio, se han producido 180 menos que los registrados hasta esa fecha el pasado año, lo que representa un descenso del 16 por ciento.

De los ocurridos el fin de semana, el domingo ha sido el día con mayor siniestralidad, con nueve muertos, ocho heridos graves y tres leves en ocho accidentes.

El sábado perdieron la vida ocho personas, en siete accidentes, en los que también hubo cinco heridos graves y dos leves; mientras que el viernes fallecieron tres personas en el mismo número de siniestros, en los se contabilizaron además cuatro heridos graves y dos leves.

Uno de los accidentes más graves se produjo en Salamanca, en la carretera A-50 (Ávila-Salamanca) a su paso por Pelabravo, en el que murieron dos personas.

El otro accidente con dos víctimas mortales ocurrió en Baleares cuando un coche embistió un grupo de bicicletas que circulaban por la carretera general de Mahón a Alaior y causó la muerte de dos ciclistas.