Izquierda Unida se plantea, incluso, un cambio de nombre cuando culmine, antes de las elecciones de 2012, el proceso de refundación del partido, en el que pretenden integrar a socialistas "desencantados", ecologistas o republicanos, y en el que este sábado se ha dado un paso más en la reunión de su ejecutiva.

Así lo han señalado a EFE fuentes de esta formación, que hoy ha reunido en Madrid a su Presidencia Ejecutiva Federal, que ha debatido, entre otras cuestiones, el documento elaborado por el secretario de Refundación de IU, Enrique Santiago, que se llevará a la Asamblea del próximo 26 de junio.

En el documento, aprobado por 24 votos a favor, uno en contra y una abstención, se afirma que el proceso de refundación debe concretarse en 2012 "en una formación política de nuevo tipo".

"No será un punto y final, pero sí un avance sustancial de un proceso más largo y estratégico de refundación de la izquierda, entendida como una expresión plural de la convergencia social y política contra el neoliberalismo", reza el documento.

En él se apuesta además por construir una organización "de nuevo tipo" a la que invitan a unirse y a trabajar juntos a diversos sectores de la izquierda que incluye a ecologistas, comunistas, socialistas de izquierdas, republicanos, nacionalistas de izquierdas, etc.

En su intervención en la reunión, que ha comenzado con un minuto de silencio en recuerdo del escritor José Saramago, el coordinador general de IU, Cayo Lara, ha señalado que no habrá refundación sin movilización y sin poner en primer plano las reivindicaciones y las luchas de los trabajadores "por conseguir una sociedad más justa".

En este sentido, ha añadido que Izquierda Unida debe convertirse en un pacífico "piquete informativo" de la huelga general convocada por los sindicatos para el 29 de septiembre.

"Hay que parar la ofensiva del capitalismo, también para eso se hace la huelga", ha apostillado.

Ha defendido la fecha elegida, porque es importante hacerla coincidir con la movilización de los sindicatos europeos, y ha insistido en que hay que explicarla bien, "con pedagogía", ya que su éxito es "decisivo" para un cambio social y político en España.

En su informe político -respaldado por 25 votos favorables, ninguno en contra y una abstención-, Lara se ha mostrado muy crítico con el Gobierno y su presidente, José Luis Rodríguez Zapatero, a quien ha acusado de ir al Parlamento como "recadero de los mercados" el pasado 12 de mayo, cuando presentó el "tijeretazo".

Lara ha advertido del segundo "tijeretazo" que prepara el Gobierno antes del otoño, con un "pensionazo", que debe ser -ha apuntado- "un compromiso" con el Fondo Monetario Internacional.

Sobre la reforma laboral, ha vuelto a decir que es un recorte "sin más" de derechos con la que se subvenciona el despido más barato.

Lara tampoco ha ahorrado reproches al principal partido de la oposición, al que ha acusado de hacer "la misma política" del PSOE, "al dictado" del poder financiero internacional.

Para el coordinador de IU, que el PP diga que es el partido de los trabajadores es "el colmo de la demagogia" y ha añadido que sus siglas (PP) se corresponde más con las del "partido peor".

A CiU le ha criticado que "únicamente" esté pendiente de las elecciones catalanas, que facilitará sacar adelante el "tijeretazo" y que, previsiblemente, también lo haga con la reforma laboral.