El presidente del Congreso de los Diputados, el socialista José Bono, ingresó en sus cuentas alrededor de un millón de euros en su negocio de la hípica de Toledo. Tal como él mismo aseguró en su reciente visita a Valencia, la pasión de su hijo José Bono jr hizo que comprara para él unas instalaciones ecuestres a las afueras de Toledo.

Según consta en el registro mercantil, su sociedad ganó 167.811,59 euros en 2005. Esta cantidad se incrementó un 72% ya que en el año 2006 consiguió sumar 290.117,30 euros. En 2007 la cifra llegó a los 485.846,17 euros, lo que supuso un 67% de ganancias más que en el ejercicio anterior. La suma total de ingresos netos en esos tres años, los últimos que recoge el registro, suman 943.775,06 euros. A pesar del volumen de negocio de esta instalación de pupilaje de caballos y entrenamiento de carreras, sólo cinco trabajadores están contratados en la finca.

Situación financiera excelente

La situación financiera de la sociedad empresarial en 2007 tenía un nivel de tesorería, una rentabilidad y un equilibrio financiero "excelentes", así como un endeudamiento "débil" según la misma fuente. La firma, a fecha de 2007, tiene activos por valor de más de dos millones de euros de los que más de 1,2 millones son fondos propios, lo que indica una buena salud económica.

Hípica Almenara es una empresa familiar en la que José Bono Martínez, el ex presidente de Castilla- La Mancha, posee el 80% de las acciones desde el 31 de diciembre de 2006. El otro 20% se divide entre sus cuatro hijos: José Bono Rodríguez tiene el 5%, al igual que sus hermanas Amelia, Sofía y Ana.

Para conseguir financiación para acometer obras en estas instalaciones, el político socialista hipotecó una casa de Madrid en el año 2001 y en 2002 hizo lo mismo con otra propiedad en Olías del Rey (Toledo), según consta en su declaración de patrimonio publicada en el Diario Oficial de Castilla-La Mancha en 2003.

José Bono jr participó hace unas semanas en el World Champions Tour celebrado en la Ciudad de las Artes y las Ciencias y, en una de las pruebas, ganó el segundo premio en saltos. Fue ese mismo día cuando su padre acudió a las carreras y confesó que su pasión por este deporte nació dada la afición de su hijo. La Hípica de Toledo ha ido creciendo de tal forma que ahora alberga varias competiciones al año, una de ellas de nivel internacional que se celebra a finales de este mes.

Más de cien mil metros

El complejo cuenta con 110.000 metros cuadrados, se ubica a escasos kilómetros del casco urbano de la capital manchega y ofrece entrenamiento de jinetes y caballos, el alquiler de cuadras, el cuidado y alimentación de los equinos y varias pistas para entrenar con vistas a las próximas competiciones, tal como consta en la web oficial. El pupilaje incluye los servicios de taquilla, guadarnés, cuadra individual, cama, limpieza, comida y uso de las instalaciones de picadero cubierto, pista de calentamiento, pista de galope y pista exterior principal.

Cambios notables en los cargos directivos de la firma ecuestre

El administrador único de Hípica Toledo, propiedad de la familia Bono, es Ramón Navas Barchino, que accedió a este cargo este mismo mes. Hasta ese momento había dos administradores: el propio Navas y Alicia Cilleruelo, personal de confianza de José Bono. De hecho, se modificaron los estatutos de la sociedad para que Ramón Navas pasase a ser el único administrador en detrimento de Cilleruelo.

Los cargos directivos han sufrido en los últimos ocho años una serie de cambios notables, ya que tanto la esposa del presidente del Congreso, Ana Rodríguez, como sus hijas Amelia y Ana cesaron de sus cargos de presidenta y consejeras delegadas, respectivamente, en agosto de 2001.