Ella es una burrita que fue recogida de la autovía el día que España ganó el mundial de fútbol y por eso la llamamos «Españita».

Él es «Nevado», un pony blanco al que le pegaron una paliza y, como consecuencia de ello, perdió un ojo. Ambos se encontraron en el Arca y, desde entonces, no hay mejores amigos.