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l temporal del pasado 12 de octubre puso en el ojo de la noticia a la localidad de Beniarbeig. La rotura del puente se convirtió en un símbolo que atrajo hasta la localidad a infinidad de autoridades, curiosos e incluso al ejército. Tres meses después, el pueblo vive con resignación, y de momento silencio, las consecuencias económicas y sociales de aquel desastre. El nuevo puente provoca todo tipo de reacciones, pero el unánime deseo de todos es que "se haga pronto".

A las 14.15 horas de la tarde en Beniarbeig, un pequeño municipio de la Marina Alta, las diferentes cuadrillas de trabajadores ultiman el sorbo de café antes de volver al tajo. Excepto los trabajadores, en su mayoría de la construcción, las calles están desiertas. Pero en cada grupo, en cada bar se repite una misma conversación: ¿qué te parece el nuevo puente? Y en una cosa coinciden todos: que lo hagan cuanto antes. Tres meses después de que el temporal, la suciedad del río y las construcciones ilegales rompieran al pueblo por la mitad y tres meses después de haber visto desfilar por las calles de la localidad toda clase de autoridades, directores generales y "señoritos", los vecinos quieren pasar página cuánto antes y recuperar la normalidad de un pueblo aislado de la comarca y partido en dos.

Pero han sido tantas las cámaras y las promesas en estos tres meses que en el municipio se ha instalado una especie de "síndrome de Mister Marshall" y cada uno expone su petición. Tras leer la información del nuevo puento a algunos les parece que es demasiado modernista para la iglesia del pueblo, que está enfrente.

Otros, en cambio, aseguran que será el puente más bonito de la comarca. Los hay que quieren mantener el del ejército aunque se haga el nuevo y algunos hasta sacan a relucir el proyecto del puente que debe unir la carretera de Sanet con la de Orba. El debate estético seguirá en Beniarbeig durante mucho tiempo, aunque ahora los vecinos lo que quieren es que su pueblo vuelva a estar unido.

El conseller de Medio Ambiente, Urbanismo y Agua, José Ramón García Antón, avanzó ayer en una visita a Ondara que la reconstrucción del puente de l'Almàssera de El Verger será una realidad en un futuro próximo. De hecho, el conseller aseguró que la tramitación está en su última fase y "ahora cabe tener un proyecto en condiciones para poder sacarlo a licitación, probablemente antes del verano". Además, García Antón aseguró que "hay presupuesto para sacarlo adelante".

Cabe recordar que el proyecto de reconstrucción del puente de El Verger se remonta años atrás, al 2002. De hecho, el permiso de la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ); para la reconstrucción caducó sin que se acometiera.