Xàbia se tira a la piscina. Y ahora en serio. La Generalitat Valenciana ha incluido en sus presupuestos para el próximo año, aprobados ayer, una partida de 1,5 millones para la construcción de la piscina cubierta de Xàbia. Las obras suben a 3 millones. Se harán en dos años.

La partida ha llegado a través de una enmienda presentada por PSPV y Compromís. Podem la apoyó. Mientras, el PP se abstuvo.

El Gobierno de Ximo Puig cumple una reivindicación con marchamo ya de histórica en Xàbia. La piscina es una inversión pendiente desde 2005. El 23 de mayo de ese año el Consell, entonces gobernado por el PP, firmó un convenio con el ayuntamiento. El primero debía construir la piscina y el segundo el trinquet municipal. Esta última instalación se inauguró hace mucho. La «pilota» estaba en el tejado de la Generalitat.

El alcalde de Xàbia, José Chulvi, del PSPV, ha sido un martillo con la piscina. Le ha recordado al Consell una y otra vez que tenía una deuda pendiente con su municipio. Arrancó de Ximo Puig el compromiso de que la piscina saldría adelante.

El conseller de Hacienda, Vicent Soler, firmó el pasado 24 de noviembre una resolución que reconoce la vigencia del convenio de 2005. La resolución incide en que el Consell cumplirá en los presupuestos de 2018 y posteriores.

Para el próximo año, la piscina ya contará con 1,5 millones. Es la mitad del coste total de las obras.

El alcalde de Xàbia expresó ayer su satisfacción al desbloquearse, por fin, una inversión que llevaba pendiente 12 años. Calificó de «alegría e inyección de optimismo» acabar el año con la confirmación de que los vecinos podrán disfrutar pronto de una infraestructura que mejorará su calidad de vida (la piscina, además de fomentar el deporte, se utilizará para cursos terapéuticos). El primer edil indicó que el gobierno local lleva ya meses preparando los trámites del proyecto, pero ha preferido llevar todo ese proceso con cautela.