Las obras de soterramiento de cableados eléctricos que se están llevando a cabo en la entrada a Dénia por el Camí de Gandia han dejado el carril bici patas arriba. El primer tramo está repleto de vallas e impracticable. Este carril bici es relativamente nuevo y ahora habrá que rehacerlo. Mientras, los ciclistas esquivan las vallas y pedalean por la calzada de los coches. No tienen otra alternativa. Para los peatones también es un tramo complicado. Los carriles bici no terminan de arrancar en la Marina Alta.