Uno de los vecinos de Teulada acusado por la asociación protectora de animales Pluto de confinar a sus perros en estrechas jaulas ha pasado al contraataque. La protectora lo denunció ante la Guardia Civil, así como ante el ayuntamiento y el juzgado de Dénia (esta última denuncia quedó archivada al entender el juez que no había causa penal), por tener a sus canes «encarcelados» en pequeños habitáculos que estaban repletos de excrementos. El dueño de los animales ha hecho ahora lo propio. Ha acudido al cuartel de la Guardia Civil de Moraira y ha presentado contra la protectora una denuncia por allanamiento de morada.

El vecino aporta a los agentes incluso el nombre de la persona que cree que ha irrumpido en su finca. Cita a Grace Jolanta Boas, la representante de la protectora que acudió a la Benemérita y el consistorio al entender que los perros sufrían maltrato al estar confinados.

El ahora denunciante sostiene que, cuando esta portavoz de la protectora Pluto lo denunció por maltratar a sus mascotas aportó a la Guardia Civil «fotos que tuvo que tomar desde el interior de la finca». Asegura que entró «sin consentimiento del propietario». Afirma también que su finca está rodeada por un muro de metro y medio y dispone de dos entradas, una cerrada con una valla metálica y otra con una puerta con candado.

La protectora logró liberar a dos podencas. Una de ellas sufría una tumoración mamaria. Los informes de los veterinarios confirmaron que estos perros sufrían atrofia muscular al haber permanecido «confinados en un espacio reducido».

Grace Jolanta había pedido al ayuntamiento que interviniera y le ayudara a liberar al resto de canes que había detectado que estaban encerrados en jaulas (al menos cinco). Fuentes municipales consultadas ayer indicaron que la Guardia Civil tiene conocimiento de los hechos por parte de ambas partes y, hasta que no concluya la investigación, no puede hacer nada.