Que la sangre no llegue al río. Ese es el cometido del agente mediador de Xàbia, un nuevo servicio que ha puesto en marcha la policía local para resolver conflictos entre los vecinos. Vila-real ha sido pionero en la mediación de los policías locales. En Xàbia, el papel de agente mediador lo encarna el agente José Luis Sánchez, quien reveló ayer que los encontronazos más frecuentes entre los ciudadanos del municipio se produce por las molestias por los ladridos de perros.

Sánchez subrayó que el agente mediador debe ser siempre neutral. Los vecinos han de mostrar voluntad de llegar a un acuerdo. Afirmó que la mediación se convertirá con el tiempo en la principal tarea de la policía local. Abundó en que «la policía del futuro» ayudará a resolver los conflictos antes de que se enconen.

Tanto el alcalde, José Chulvi, como la concejala de Seguridad, Pepa Gisbert, recalcaron que Xàbia es un pueblo de convivencia en el que viven personas de más de 80 nacionalidades. En esa torre de Babel, no es fácil entenderse. El agente mediador ayudará a zanjar disputas incipientes y a fomentar la paz y el diálogo entre los vecinos.