El temporal del pasado fin de semana también se cebó con los árboles. El vendaval echó abajo cientos de árboles en la Marina Alta. Una de las zonas más afectadas es el cabo de Sant Antoni, en el parque natural del Montgó. Pinos de considerable porte que se salvaron del incendio que en septiembre de 2015 arrasó esta zona (calcinó 444 hectáreas) han caído ahora. Las fuertes rachas de viento los han arrancado de raíz. Los árboles derribados están en la montaña pública y también en parcelas privadas de esta zona del Montgó que pertenece a Xàbia. El vendaval ocasionó un efecto dominó. Tumbó pinos que, a su vez, cayeron sobre otros que también se vinieron abajo.

En este paraje, se han llevado a cabo trabajos de restauración paisajística tras el incendio. Los pinos que se salvaron del fuego eran adultos y tenían una considerable altura. Superaron aquella catástrofe, pero ahora el viento ha acabado con más de un centenar.