El Consell, los alcaldes de Dénia, Gandia y Oliva y los empresarios de la Safor y la Marina Alta viajan en el mismo tren. El de la Costa. Pero, de momento, no arranca. La consellera de Obras Públicas, María José Salvador, se reunió ayer en Dénia con los munícipes y la patronal. Y destacó el consenso «institucional, social y empresarial» por recuperar una conexión ferroviaria, la de Gandia, Oliva y Dénia (forma parte del Tren de la Costa), que se cerró hace ya 42 años.

La consellera subrayó que el Tren de la Costa «es una infraestructura clave y fundamental para vertebrar la Comunitat» y para facilitar el transporte público entre las comarcas de la Marina Alta y Baixa y la Safor. Avanzó que el Consell exigirá al ministerio de Fomento que las obras comiencen, precisamente, por la línea que volverá a unir Gandia, Oliva y Dénia. Dijo que es el tramo que más urge, ya que los vecinos de la Marina Alta sólo están conectados al mundo con una autopista de peaje, la AP-7, y la carretera N-332.

Salvador expresó su discrepancia con el estudio informativo del ministerio, que concluye que la línea no será rentable y plantea hacerla de velocidad alta y eliminar numerosas estaciones. El Consell y los ayuntamientos han presentado alegaciones. La consellera sostuvo que, además de los criterios económicos, hay que valorar la «rentabilidad social y medioambiental» de esta línea. Abogó por que un Tren de la Costa que conecte un territorio que «ahora está aislado». Aseguró también que la Generalitat exige que este proyecto sea prioritario en el plan nacional de infraestructuras.