­La sanción que reveló Levante-EMV al presidente de la falla de Camp Roig, Damián Linero, por abrir el desfibrilador del centro social y disparar la alarma sanitaria es de dos años. Durante ese tiempo no podrá poner un pie en el centro social. La sanción la ha impuesto la junta local fallera. Las cámaras del centro social captaron al joven abriendo el desfibrilador. A la única presentación fallera que puede asistir es a la de su comisión.