Unas 80 personas participaron ayer en la calle marqués del Campo de Dénia en una «performance» convocada por colectivos animalistas. Los manifestantes, que se disfrazaron de toros y se pintaron el cuerpo de rojo (representaba la sangre), denunciaron el maltrato animal en las fiestas de «bous a la mar» que se celebran en la localidad. Durante la protesta, gritaron «la tortura no es cultura» y pidieron la abolición de estos espectáculos declarados Fiesta de Interés Turístico Nacional en 1993.