Calp ha comenzado la campaña turística con el paso cambiado. Y eso que la Semana Santa, la de las procesiones y los pasos, ha funcionado a las mil maravillas y ha atraído a numerosos turistas al casco antiguo.
El equipo de gobierno (PP y dos grupos independientes), en una reciente junta de gobierno, debatió fuera del orden del día una propuesta del concejal de Turismo, Jan Van Parijs, que incidía en que «el cierre repentino» del puerto deportivo de Puerto Blanco puerto deportivo de Puerto Blanco y la prohibición de subir hasta la cima del Penyal d'Ifac (pronto se cumplirá un año de la clausura de la senda) han provocado «un perjuicio para los intereses turísticos del municipio». En cuanto al precinto de la dársena deportiva, el edil lamenta que se haya producido «ante el inminente inicio de la temporada turística».
La propuesta, que reclama al Consell que tramite con «la máxima urgencia y celeridad posible»los procedimientos que permitan reabrir el puerto, expone que varias empresas «que conformaban buena parte de la oferta complementaria turística de Calp y que contribuyen a diversificar el producto turístico y la competitividad como destino» se han quedado en la calle.
El concejal de Turismo se refiere a las mercantiles que operaban en Puerto Blanco. Detalla que eran Casiopea Dive, que explotaba la escuela y centro de buceo; Gustavo Martí Xiffoni, que se dedicaba al alquiler de motos de agua y embarcaciones; Baraduc Nicholas Flyboard Calpe, que también alquilaba motos acuáticas y barcos de recreo, e Iber Gaudium, que explotaba el bar restaurante del puerto deportivo. Asegura que estas mercantiles generan durante la temporada 20 puestos de trabajo.
«En definitiva concluye la propuesta, el cierre de esta infraestructura, junto a la restricción de accesos al Penyal d'Ifac, ambos ajenos a la voluntad de este ayuntamiento, han mermado sustancialmente el atractivo turístico del municipio y la oferta complementaria». El concejal de Turismo subraya que estos dos hechos «han despertado la preocupación de los agentes turísticos locales y del propio ayuntamiento».
La conselleria de Obras Públicas ya ha anunciado que invertirá 600.000 euros en acometer obras de urgencia para reparar Puerto Blanco y poder reabrirlo. Hace tres semanas desahució a la empresa Acintur Bahía, que lo explotaba desde 2008 y cuya concesión, que era por tres años, ya hacía mucho que había caducado. Mientras, la conselleria de Medio Ambiente también iniciará obras en el Penyal nada más pase Pascua.
Pero al Ayuntamiento de Calp no le basta. Quiere que el Consell pise el acelerador. De ahí que la junta de gobierno aprobara por unanimidad la propuesta del concejal de Turismo. Además de pedir «máxima celeridad» en los trámites, el consistorio pone a disposición de la Generalitat sus servicios técnicos para ayudar a la «resolución urgente de estos procedimientos». Calp no quiere jugar en desventaja en materia de turismo, que es el sector del que vive la mayor parte de la población.
