El alcalde de Calp y presidente de la Diputación de Alicante, César Sánchez, del PP, también es partidario de suprimir el «bou embolat» y el «encaixonat» de las fiestas de la Mare de Déu de les Neus, que se celebran en la primera quincena de agosto y que dedican una semana a los «bous al carrer». Preguntado ayer por este diario, Sánchez se declaró «defensor» de los «bous al carrer». Pero precisó que está en contra del maltrato animal y de espectáculos en los que al toro se le causa sufrimiento. Dijo que él consideraba que en el «bou embolat» y en el «encaixonat» el astado sí que sufre. El pasado año, en las fiestas calpinas de les Neus, se embolaron tres toros.

Sánchez es el primer alcalde del PP que muestra, abiertamente, su rechazo a dos suertes de los «bous al carrer» que, en la Marina Alta, ya han suprimido de los programas de fiestas tres municipios, Ondara, Xàbia y el Poble Nou de Benitatxell. Calp podría ser el cuarto pueblo que elimina estos espectáculos. Con todo, incluso una población tan taurina como Pedreguer («la catedral dels "bous al carrer"») se lo estaría planteando.

El munícipe calpino, eso sí, subrayó que las sueltas de toros y vaquillas en las fiestas de su municipio son un atractivo turístico de primera. El centro histórico se llena de público. Se mostró convencido de que los festejos de «bous al carrer» no se resintirían ni dejarían de atraer a espectadores si se eliminara el «bou embolat».