El Ayuntamiento de Calp ha ordenado la demolición de la tercera planta levantada sin licencia de una vivienda de la partida Oltamar. Además, impone al promotor de las obras, que eludió varias órdenes de paralización, una segunda multa coercitiva de 2.000 euros. La Brigada Verde paralizó y precintó las obras el pasado mes de junio. Sin embargo, el promotor rompió el precinto y finalizó la cubierta y el forjado volado de esa nueva planta. A principios de este mes de diciembre, la edil de Protección del Territorio, Ana Sala, volvió a ordenar el precinto y la paralización. Pero el promotor siguió a la suya. Acabó las obras ilegales. Ahora las deberá demoler. De lo contrario, el consistorio le impondrá nuevas sanciones.