El PP insistió ayer en que nada sabía de la sentencia del TSJ que hace un año condenaba al tránsfuga Juan Collado a devolver los 130.000 euros que cobró del ayuntamiento de sueldo ilegal. Pero los populares dejaron claro que, por ellos y tras fallecer Collado el pasado mes de abril, ese fallo bien podía haber seguido arrumbado en un cajón por los siglos de los siglos.

El comité ejecutivo del PP de Dénia lanzó ayer una nota de prensa sobre el asunto «de la ejecución de la sentencia contra el difundo edil Juan Carlos Collado». «Descanse en paz, si le dejan», apostillaron los populares. Calificaron de «deplorable y carente de sensibilidad y de respeto a una persona fallecida y a su familia» que el gobierno local (PSPV y Compromís) llevara a pleno la ocultación de la sentencia (el actual munícipe Vicent Grimalt culpó a su antecesora, la popular Ana Kringe). «No se han tenido en cuenta los sentimientos de su viuda, sus hijos y sus padres, que siguen guardando el luto», criticó el PP. Sin embargo, este partido sí precisó que apoya la comisión de investigación que se creó en el pleno para aclarar quién escondió el fallo. Pero, a continuación, ya deslizó que el ayuntamiento lo tiene crudo para recuperar el dinero que se embolsó ilegalmente el tránsfuga socialista que en 2008 le dio la alcaldía a Kringe. «¿Qué va a hacer ahora el equipo de gobierno para ejecutar la sentencia? ¿Van a dirigirse a su viuda, sus padres o sus hijos?», preguntaron los populares.

Mientras, Ana Kringe insistió ayer en que la sentencia no tenía registro de entrada y que a ella nunca le llegó. El PP, por su parte, afirmó que mientras estuvo en el gobierno todas las sentencias «favorables o no pasaban por la junta de gobierno». «No se ocultó absolutamente nada. Y si no, que se lo pregunten al secretario municipal».

El caso es que la sentencia ha estado en un cajón desde diciembre de 2014, al igual que el auto de febrero que pedía al ayuntamiento su ejecución.

Collado falleció en abril a los 51 años de edad. Llevaba retirado de la política desde 2011. Ya no vivía en Dénia. Regentaba con su familia un hotel rural en Teruel. En 2008, puso patas arriba la política de Dénia al dar su imprescindible apoyo a la moción de censura que desbancó a su hasta entonces compañera en el PSPV, Paqui Viciano.