El equipo de gobierno de Xaló, de Compromís, está que trina con la Diputación de Alicante. Ahora ha revelado que la presidenta de este organismo, Luisa Pastor, en una reciente reunión en Dénia con los alcaldes de la Marina Alta, dejó patente que los pueblos donde no gobiernan ni el PP ni el PSPV lo tienen crudo a la hora de rascar subvenciones.
En esa reunión, el alcalde de Xaló, Joan Miquel Garcés, preguntó a Luisa Pastor sobre el motivo de dejar fuera del plan de obras provincial el proyecto de reparación de la red de agua de su municipio (ahora se pierde el 70 % del suministro). Fuentes municipales indicaron ayer que Garcés se quedó pasmado con la contestación de la presidenta. Apuntaron que le vino a decir que los diputados populares y socialistas tienen un pacto para repartirse las ayudas en los municipios que gobiernan, mientras que para el resto se quedan con las migajas.
El consistorio de Xaló considera que esa intervención de Pastor es «la constatación de un secreto a voces», que las subvenciones de la diputación se conceden «más por motivos políticos que técnicos».
Los servicios jurídicos del ayuntamiento están, de hecho, estudiando incluir las palabras de la presidenta de la diputación en una posible causa judicial contra el plan provincial de la diputación. De momento, el consistorio ya ha impugnado ese plan de obras.
