El alcalde de Xàbia, José Chulvi, del PSPV, está convencido de que el desastre del Montgó se pudo haber evitado. «Xàbia y la Plana (una partida del Montgó donde hay numerosas viviendas) han sufrido uno de los incendios más desastrosos de su historia», lamentó ayer Chulvi, que denunció que en las primeras horas del fuego el despliegue de medios aéreos fue insuficiente. De hecho, reveló que el Ministerio de Medio Ambiente rehusó enviar sus hidroaviones tras reclamarlos el PMA (Puesto de Mando Avanzado). El fuego había comenzado a las 16.00 horas, pero el Ministerio comunicó al Centro de Coordinación de Emergencias a las 18.44 horas que ya no movilizaba sus aeronaves ya que sólo iban a poder realizar una descarga de agua antes de retirarse al anochecer. Al día siguiente (el viernes), ya llegó toda la fuerza aérea. Pero para entonces el incendio había arrasado el cabo de Sant Antoni y devorado 444 hectáreas del Montgó, más de la quinta parte del parque natural.

El alcalde también denunció que la partida de la Plana, que pertenece a Xàbia, quedó «abandonada a su suerte». Dijo que los medios locales se vieron «prácticamente solos» para combatir el fuego. Mientras que los bomberos y los efectivos de la UME (Unidad Militar de Emergencias) esperaban que el frente llegara a les Rotes, en Dénia, el viento cambió y lo devolvió a Xàbia. Chulvi dijo que en la Plana sólo habían permanecido dos camiones de bomberos. Las llamas devastaron el cabo, llegaron a la urbanización de la Cuesta de San Antonio y bajaron por la ladera del núcleo del Puerto.

El munícipe aseguró que la Policía Local «se desgañitó» avisando de que el fuego regresaba a la Plana, pero no hubo reacción. Calificó de «incomprensible» la decisión de trasladar del campo de tiro de Xàbia, que está elevado y ofrece muy buena visión, a una hondonada de Dénia el PMA y aseguró también que la sensación allí era de «descoorinación». La evolución del fuego constató luego el error de alejar el PMA del punto caliente del incendio.

También instó a revisar los protocolos de actuación y evacuación. «No puede volver a ocurrir una catástrofe como ésta. Se han puesto es peligro vidas y propiedades, así como el patrimonio forestal y paisajístico de nuestro pueblo».

El alcalde aseguró que su primera prioridad durante el incendio y también ahora «son los vecinos». Anunció que se les eximirá de pagar el próximo recibo de agua y se les ayudará a reclamar las indemnizaciones a los seguros.

Además, criticó los recortes de la Conselleria de Medio Ambiente en vigilancia y mantenimiento del parque del Montgó. También le reprochó «exceso de rigidez»con los vecinos de la Plana, quienes «forman parte de la vida del parque natural».

El alcalde reclamó al Consell que destine una partida urgente para regenerar las 444 hectáreas del Montgó. Avanzó que el Ayuntamiento también lo hará aunque eso signifique apartarse del equilibrio presupuestario. «Por encima de los recortes está la seguridad de las personas». Además, exigió que la junta rectora del Montgó reaccione y pilote las acciones de regeneración. Lamentó que este organismo hasta ahora ha sido «inoperante».