Carla y Candela fueron anoche las dos personas más felices del mundo. Con permiso de sus padres, claro, que también estaban exultantes. Ellas son ya las nuevas Falleras Mayores de Dénia. Recibieron con la habitual emoción la llamada de teléfono de la alcaldesa, Ana Kringe. Candela Pastor, de 10 años, se confesó «muy contenta y nerviosa». «Ha sido una gran alegría. No me lo esperaba». Sus padres, Ximo y Silvia, y su hermano Manel se la comían a besos. Estudia cuarto de primaria en el colegio Paidos. Es, desde que nació, de la falla París Pedrera. «Lo que más me gusta de las fallas es la plantà, la ofrenda y la cremà», dijo la niña con la mirada chispeante de la emoción.

«Cada vez más nerviosa»

Carla esperó la llamada cogida de la mano de su madre. «No sonaba el teléfono y cada vez estaba más nerviosa. Al final, vi a todos saltando y ya lo supe. Era la nueva Fallera Mayor de Dénia». También lleva en la sangre las fallas. Tiene 23 años y pertenece al distrito Port Rotes. Su novio, Juan Antonio, es este año el presidente de esta falla. La noticia de que su chica es la Fallera Mayor de Dénia le ha pillado un poco lejos. Es militar de la Armada y está de maniobras en Italia. Carla no había podido hablar con él tras recibir la llamada de la alcaldesa. «No, todavía no me ha felicitado. Pero me dejó una carta por si esto ocurría».

La joven está acabando los estudios de podología. «Desde pequeñita soy fallera y sé que este año va a ser muy especial. Estoy supercontenta», acertó a decir mientras recibía felicitaciones sin parar.

Las falleras salientes, Sara Femenía y Paloma Mengual, dieron la enhorabuena a sus sucesoras. Ya tendrán tiempo de transmitirles también algún consejo.