La gastronomía de Calp sabe a mar. «L'arròs del senyoret» es el plato estrella de la cocina tradicional calpina. Pero la clave de todo es el pescado fresco. De la lonja a la mesa. Un sector tan castigado en los últimos años como el de la pesca se convierte ahora en imprescindible en la apuesta que la ciudad del Penyal ha hecho por poner en valor sus recetas.

Este fin de semana el puerto de Calp bulle de actividad. Allí se celebra la primera «Fira del Peix de Calp i de l'Arròs del Senyoret». El Ayuntamiento y la Cofradía de Pescadores le hicieron el viernes por la noche un guiño a aquellos restaurantes que cocinan el pescado fresco de la lonja. Este año 18 restaurantes han logrado el distintivo de «Peix de Calp». El acto de entrega de los diplomas acreditativos contó con la presencia de la directora general de Pesca de la Generalitat Valenciana, Marta Valls, y de los ediles de Turismo, Pesca y Hacienda, Jan Van Parijs, Matías Torres y Francisco Cabrera. No faltó, por supuesto, el patrón mayor del Pòsit, Juan Pérez. Los pescadores hacen posible que el producto fresco y de primera calidad llegue a las mesas de los mejores restaurantes calpinos.

El distintivo de «Peix de Calp» es una garantía para los clientes. Saben que van a degustar lo mejor de la cocina marinera local. Ahora que el turismo gastronómico está tan de moda, contar con una materia prima de la calidad del pescado de la lonja calpina es jugar con ventaja.

El alcalde de Calp, César Sánchez, lo tiene claro. «El Ayuntamiento siempre va a estar al lado de los pescadores. Esta actividad forma parte de nuestra historia y de nuestro futuro», afirmó el munícipe, que incidió en que la marca «Peix de Calp» es «reflejo de excelencia» y «nos identifica como destino gastronómico de calidad y prestigio».

El certamen gastronómico celebró anoche «La nit del polp». El «arròs del senyoret» es protagonista desde que el jueves se inauguró esta feria. Ayer lo cocinaron los restaurantes Andalucía, Playa-Lonja, el Real Club Náutico de Calp, el Baydal (se le tiene por el inventor del plato) y el Cantal. Cada cocinero le da su toque. Pero este arroz se diferencia de otros en que todo el pescado y el marisco están pelados. Se cocinaba para los «senyorets» que no querían mancharse las manos. Ahora se ha democratizado y Calp lo ha convertido en un plato imprescindible para cualquier turista que quiera descubrir su cocina marinera.