Las condenas urbanísticas llegan de semana en semana en Dénia. Rara es la Junta de Gobierno en la que no se dé cuenta de otro revés en los tribunales. El portavoz del Gobierno y concejal de Hacienda, Vicente Chelet, del PP, reveló ayer que en la junta de esta semana se dio cuenta de una nueva sentencia que obliga al Ayuntamiento a devolver 20o.000 euros de un aprovechamiento urbanístico cobrado indebidamente. Y también se informó de una demanda presentada por el dueño de dos parcelas de les Marines que están declaradas zona verde, quien pide al Consistorio una indemnización de 1,7 millones de euros. Chelet dijo que la sentencia ya la han recurrido ante el TSJ y que también han designado abogados para defenderse en la demanda.

El portavoz del Gobierno local (PP y Centre Unificat) cuantificó en 30 millones de euros los pleitos urbanísticos perdidos por el Ayuntamiento. Estos litigios son, sobre todo, por aprovechamientos urbanísticos mal cobrados y que ahora se deben devolver y de expropiaciones calculadas muy a la baja y que los tribunales corrigen. Ahí se incluyen los 13 millones que el TSJ obliga a pagar por expropiar una parte de la finca de l´Hort de Morand, donde siguen los restos de la antigua Dianium romana.

El concejal de Hacienda destacó ayer la buena predisposición de los demandantes a negociar convenios. El Ayuntamiento no tiene, desde luego, capacidad económica para pagar las condenas a toca teja. Además, a cada nuevo tropiezo en los tribunales, el presupuesto tiembla y aumenta la morosidad con los proveedores.

«Congelar» impuestos

Chelet, de hecho, atribuyó los problemas para ponerse al día en las facturas (el último informe de morosidad sitúa la deuda con proveedores en 7,3 millones) a esa sangría de condenas judiciales. Pero anticipó que, pese a todo, el Gobierno local hará lo imposible para «congelar» los impuestos y tasa el próximo año. El edil de Hacienda anticipó que quienes sí se tendrán que apretar el cinturón serán los concejales, ya que habrá que redoblar los esfuerzos de contención en el gasto y recortar el próximo presupuesto. Reducir los impuestos, precisó Chelet, es por ahora una quimera.