Un hombre de 63 años, que estaba pasando sus vacaciones en Calp junto a sus familiares, falleció ayer al precipitarse por un acantilado de la cala Calalga. Por causas que ayer se desconocían, se cayó por el cortado que está en el tramo final del paseo marítimo de la playa de la Fossa. Alrededor de las 11 horas, otra persona que paseaba por la zona vio el cuerpo en las piedras de la base de un cortado que tiene una altura de unos diez metros.

La policía judicial de la Guardia Civil se hizo cargo de la investigación. Los bomberos del parque de Benidorm rescataron el cadáver. La identidad del fallecido, que residía en Madrid, no trascendió hasta última hora de la tarde. Se supo que se apellidaba Ripoll y que estaba de vacaciones junto a su familia. Se preguntó en todos los hoteles si faltaba algún huésped que respondiera a la descripción del fallecido.

El tramo del paseo donde ocurrió el accidente cuenta con un murete de apenas medio metro; al otro lado está el acantilado.