Fuga, de Juan Antonio Espigares, logró el premio al mejor cortometraje en la cuarta edición de Curt al Pap, el festival de Parcent. El palmarés se hizo público el sábado. El jurado se decantó por un trabajo que viene avalado por los galardones que consiguió en los certámenes de Sitges y Málaga. Además, fue preseleccionado para los Goya. Ojos que no ven, de Natalia Mateo, cortometraje finalista de los Goya, obtuvo en Parcent el premio del público. Está visto que los espectadores de Curt al Pap tienen buen ojo para los cortos. La Cruz, de Alberto Evangelio, se llevó la distinción al mejor trabajo de la Marina Alta y Baixa. Mientras, el premio mejor corto en valenciano fue A new way of live, de Mikel Mas. El festival de Parcent ha dado otro salto de calidad y ya se ha hecho un hueco importante en el mundo del corto.