El departamento de Urbanismo de Xàbia ha abierto un expediente de infracción urbanística por unas obras, efectuadas en sábado y que carecen de licencia, en uno de los chalés que se asoma al acantilado de la cala de la Granadella. Los trabajos no eran gran cosa: cambiar una cubierta y realizar reformas que, aparentemente, no significaron aumentar la volumetría de la construcción. También, al parecer, se realizaron pequeños movimientos de tierra.

Pese a que la Granadella es un paraje litoral protegido (tiene la calificación de suelo no urbanizable de especial protección ecológico-paisajística) y que el chalé está colgado del acantilado, sus dueños, en condiciones normales, podían haber solicitado un permiso de obra menor. Pero llueve sobre mojado. El ayuntamiento no podía conceder la licencia puesto que los propietarios ya se enfrentan a otro expediente de infracción por abrir hace poco más de un año un vial de acceso a la vivienda. Ese camino podría incluso invadir terreno público. Además, ocasiona un fuerte impacto paisajístico. El consistorio, en el anterior mandato, denunció los hechos ante la Fiscalía al entender que podía haberse cometido un delito contra la ordenación del territorio.

Las nuevas obras se realizaron un sábado de hace un par de semanas. Unos vecinos de la Granadella advirtieron de que una pequeña máquina acarreaba materiales por el camino "ilegal". Incluso llamaron a la policía local.

El lunes acudieron los inspectores de obras del ayuntamiento y comprobaron que se habían realizado obras menores. Ya no hacía falta paralizar nada, puesto que los trabajos estaban terminados. Eso sí, el consistorio ha incoado un expediente de infracción urbanística. Uno más.