Las habituales calmas de enero se han retrasado este año a febrero y, con el anticiclón de los últimos días, han hecho mucho más llamativo un fenómeno que se repite cada año. Ayer y sobre todo el jueves el nivel del mar había bajado en la costa valenciana entre 30 centímetros y medio metro. A los pescadores no les pasó desaparecibido que el mar "se ha retirado" este año unos centímetros más de lo habitual. Ayer se pudo ver a varias personas "pescando" esos bogamarins con los métodos tradicionales.