El presupuesto de Benissa para 2011 contempla un incremento del 35% de las inversiones. Pero el dato, como reconoció ayer el propio alcalde, Juan Bautista Roselló, del PP, es irreal, dado que una de las principales inversiones es más que dudosa. Las cuentas reservan los 300.000 euros que, por convenio, debe aportar el Ayuntamiento para construir el nuevo cuartel de la Guardia Civil. Al Ministerio de Interior corresponden los 600.000 euros restantes. "No soy nada optimista. Las noticias que tenemos son que, al igual que Fomento con la variante, el Ministerio de Interior ha retirado estos fondos", afirmó Roselló.

El alcalde de Benissa y la concejala de Hacienda, Francisca Capó, desglosaron ayer el presupuesto y defendieron que es realista y equilibrado. Roselló afirmó que la deuda es "prácticamente inexistente". Explicó que asciende a 2,7 millones de euros, pero 1,8 millones "son generados de construir el instituto y es una deuda que sufraga la Generalitat Valenciana"."Es un presupuesto para hacer frente a la crisis y que garantiza la solvencia económica del ayuntamiento", concluyó.

El presupuesto se aprobó anoche en pleno. Pero la oposición (Cibe-Bloc y PSPV) votó en contra. En principio, el edil de Cultura, Xavi Tro, que pertenece al grupo municipal de Cibe-Bloc, pero en las próximas elecciones irá en la lista en solitario del Bloc, tenía previsto abstenerse.

Fuentes de Cibe-Bloc denunciaron ayer que las cuentas son irreales, pues el tope contrastado de ingresos son 14 millones y no 18,7 millones. Pidieron que para ahorrar se supriman las seis dedicaciones exclusivas y los 12 cargos de confianza. Sus sueldos suben a 600.000 euros al año.