­Un año más ha llegado el 23 de abril, la jornada en que se recuerdan con mayor insistencia todos los valores positivos que nos transmitirá la lectura. Una estupenda forma de pasar el Día del Libro consiste en reivindicar el sano hábito de devorar páginas, una tras otra -en sentido metafórico, obviamente- y aprender a través de lo que ellas nos cuentan. Conocimientos de todo tipo o, sencillamente, historias que también nos aportarán mucho.

Muchas celebraciones se sucedieron ayer para conmemorar esta jornada. Entre ellas, la que tuvo lugar otra vez en el Club INFORMACIÓN, y con ésta ya van 13 ediciones: el maratón de lectura organizado por el Grupo Leo. Siete centros escolares de la ciudad de Alicante -Pedro Duque, Mediterráneo, La Aneja, Nazaret, Inmaculada, Sagrada Familia y Don Bosco- participaron en la iniciativa, con la lectura continuada de diversas obras de autores alicantinos a lo largo de la mañana. Algunos de ellos, como Gabriel Miró, Azorín o Miguel Hernández, de los que podríamos considerar «clásicos», pero también obras de escritores que en estos momentos están publicando libros, y dando de esa forma a los lectores lo mejor de su creatividad.