En sus veinte meses de Gobierno, Prodi, ha pedido al Parlamento 33 mociones y votos de confianza. Aunque en teoría mociones y votos son diferentes -las primeras piden el respaldo a la política del Gobierno y los segundos son un recurso para agilizar la tramitación de una ley-, en la práctica sus efectos son iguales, ya que no superarlos supone la caída del Gobierno. La primera cuestión de confianza del Gobierno Prodi, además de la obtenida en la misma sesión de investidura, se planteó en febrero de 2007, cuando tuvo que dimitir después de que el Senado rechazó sus propuestas de política exterior.

Al igual que la sesión de investidura, esas mociones se cuentan doble, una por cada Cámara. Pero, además, en estos veinte meses el primer ministro ha pedido el voto de confianza para la aprobación de una ley en 27 ocasiones, catorce en la Cámara de los diputados y trece en el Senado. De este modo, el actual Gobierno supera el número de votos de confianza que solicitó, entre el 11 de junio de 2001 y el 23 de abril de 2005, el Gobierno de Berlusconi, que sumó un total de 29 votaciones.