Las autoridades filipinas han anunciado la muerte de al menos 26 personas y la desaparición de otras 23 por las inundaciones y avalanchas de tierra causadas por la tormenta Kai-Tak en la región central de Filipinas, mientras que el número de afectados ronda los 222.000.

Las víctimas mortales se registraron en Caibiran (14), Almeria (4), Naval (4, donde además hubo 23 desaparecidos) y Biliran (1 y 3), según los datos del Consejo Provincial de Gestión y Reducción del Peligro de Desastre de Biliran.

El gobernador de Biliran, Gerry Boy Espina, propondrá mañana a las autoridades la declaración del estado de emergencia en esa provincia del este del archipiélago filipino y con una población de unos 172.000 habitantes, según la cadena de televisión GMA.

El número de afectados asciende a 221.953 personas, de las cuales 87.719 se encuentran acogidas en 264 centros de evacuados, mientras que 198 son atendidas fuera de estos centros, según datos oficiales.

La tormenta Urduja, su nombre local, ha perdido fuerza durante el fin de semana y se ha convertido en una borrasca con vientos sostenidos de 55 kilómetros por hora cerca del centro y ráfagas de hasta 80 kilómetros por hora que se mueve en dirección sursuroeste a 15 kilómetros por hora, informa hoy el servicio meteorológico filipino (PAGASA).

Las copiosas precipitaciones que la acompañan aún son una amenaza para la población en forma de inundaciones y corrimientos de tierra, por lo que la alerta hoy está dirigida para Quezon, Batangas, Mindoro, Marinduque, Romblon y al norte de la isla de Palawan, la más occidental de Filipinas y antesala del mar de China Meridional

Al menos dos puentes y 19 tramos de carreteras han quedado intransitables y 15.534 personas se encuentran varadas en distintos puertos por la cancelación de los viajes marítimos. Se han cancelado también 57 vuelos nacionales desde el día 13 a causa de Kai-Tak, de ellos al menos 21 este domingo. PAGASA prevé que la borrasca atraviese Palawan el lunes y se aleje por el mar de China Meridional el martes.

Entre 15 y 20 tifones visitan todos los años el archipiélago filipino durante la temporada lluviosa que, por lo general, empieza en mayo o junio y concluye en noviembre o diciembre. El tifón Haiyan, uno de los más poderos en el registro de Filipinas, visitó el país en noviembre de 2013 con rachas de viento de hasta 315 kilómetros por hora y dejó 6.300 muertos, más de mil desaparecidos y 14 millones de damnificados.