El presidente de EEUU, Donald Trump, firmó hoy la ley aprobada por el Congreso que endurece las sanciones contra Rusia, informó a Efe un funcionario de la Casa Blanca.

La ley, adoptada la semana pasada por el Senado, fortalece las sanciones contra Rusia debido a su supuesta interferencia en las elecciones de 2016 en EEUU, sus acciones en Ucrania y en Siria, y sus violaciones de derechos humanos, y limita la capacidad de Trump de levantarlas sin el visto bueno del Congreso.

El presidente promulgó la ley después de la orden decretada la semana pasada por Moscú para que Washington recorte su personal diplomático en Rusia en respuesta a esas últimas sanciones aprobadas por el Congreso norteamericano.

El presidente ruso, Vladímir Putin, achacó la semana pasada las sanciones a una "histeria antirrusa" en EEUU, y su Ministerio de Asuntos Exteriores indicó que representan "un paso muy serio hacia la destrucción de las posibilidades de normalizar la relaciones".

Pese a las sanciones, Trump ha intentado mejorar las relaciones con Rusia desde su llegada al poder en enero pasado, aunque ese intento se ha visto eclipsado por la investigación sobre los posibles lazos entre su campaña y Moscú en los comicios de 2016.El Kremlin considera "contradictorias" las sanciones

El Kremlin ha denunciado este miércoles estar recibiendo alegaciones "contradictorias" por parte de la Casa Blanca en relación a las nuevas sanciones que el Congreso de Estados Unidos ha aprobado contra Rusia.

El Secretario de Estado de Estados Unidos, Rex Tillerson, ha dicho que ni él y ni el pesidente, Donald Trump, creyeron que las nuevas sanciones "fuesen de ayuda" para reconstruir los vínculos bilaterales con Rusia. Sin embargo, la Casa Blanca también ha dicho que Trump tiene intención de firmar las sanciones.

Al ser preguntado por las delcaraciones de Tillerson, el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, ha dicho a los periodistas: "Hemos hecho caso omiso a esas alegaciones. Entendemos que existe una gran contradicción en los términos que han sido fijados por la Casa Blanca".

"Sin duda, es importante que el presidente de Estados Unidos esté reflexionando sobre el estado actual de sus relaciones bilaterales y sobre sus perspectivas", ha añadido.