La primera ministra británica, Theresa May, está dispuesta a ofrecer a los ciudadanos comunitarios libre circulación en el Reino Unido durante dos años tras la salida de país de la Unión Europea (UE), informa hoy el diario "The Times".

Este plan ha sido elaborado por el titular británico de Economía, Philip Hammond, y, tras unas primeras reticencias de otros ministros conservadores, cree contar ahora con el apoyo de todos los miembros del Gobierno, indica el periódico. Así, se aplicaría un nuevo régimen de inmigración una vez cumplido ese periodo de transición de dos años.

Bruselas quiere restringir el libre movimiento de más de un millón de británicos que viven en el continente, puesto que tendrían derecho a seguir residiendo en el país donde están actualmente pero perderían el derecho automático de vivir y trabajar en otro Estado miembro de la UE, indica el rotativo, que no aporta más detalles de este plan comunitario.

En las negociaciones sobre el "brexit", Bruselas y Londres mantienen discrepancias sobre el derecho de los comunitarios que viven en el Reino Unido y de los británicos que residen en la UE.

El negociador jefe de la UE para el "brexit", Michel Barnier, celebró ayer con el titular para la salida del Reino Unido de la UE, David Davis, la última reunión de la segunda ronda de negociaciones.

Davis reconoció ayer que su país coincide con la UE en la "necesidad de certidumbre" aunque discrepa con la perspectiva de Bruselas.

Bruselas quiere que el Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) garantice los derechos de los ciudadanos europeos en el Reino Unido y de los británicos residentes en la UE.