China cuenta con dos nuevos héroes. Dos hombres que, sin pensárselo, fueron al rescate de una niña que se había quedado colgada en el balcón de su vivienda, en un tercer piso.

Sólo los barrotes la sujetaban por la cabeza. Al verla, los hombres saltaron a la azotea y por la repisa pudieron ponerse a su altura, abriendo con unos alicates el espacio suficiente para poder sacar a la pequeña de allí. Los tres están sanos y salvos.