Al menos dieciocho personas murieron en las últimas horas en bombardeos y por una explosión en distintas zonas del norte de Siria, según informó hoy el Observatorio Sirio de Derechos Humanos.

Siete de los fallecidos -entre ellos una niña, dos miembros de la Defensa Civil (un grupo de voluntarios que presta labores de rescate) y un combatiente islámico- perdieron la vida por un ataque de aviones de guerra contra la localidad de Jan Shijún, en el sur de la provincia de Idleb.

La ONG, que no precisó el origen de los aparatos, agregó que el bombardeo también causó decenas de heridos.

Por otro lado, uno de los 70 afectados de asfixia en un supuesto ataque aéreo ayer con gas cloro en la ciudad de Alepo falleció anoche, indicó el Observatorio.

La ONG recordó que fuentes médicas han acusado a las fuerzas gubernamentales de haber llevado a cabo ese ataque contra el barrio de Al Sukari.

Mientras, en la provincia de Hama, al menos diez jornaleros, entre los que hay mujeres, murieron por la explosión de una mina al paso del vehículo en el que se trasladaban para ir a trabajar en una carretera entre las áreas de Hayazi Zalin y Al Musasana.

El Observatorio explicó que el explosivo había sido colocado tiempo atrás por los efectivos del régimen en esta zona del norte de Hama.