La opinión pública alemana ha mostrado su sorpresa e inquietud ante el nuevo plan de defensa civil que el consejo de ministros alemán tiene previsto estudiar este miércoles, y que entre otras medidas contempla pedir a la población que haga acopio de víveres para afrontar un posible ataque o catástrofe.

Según el periódico Frankfurter Allgemeiner Sonntagszeitung, el nuevo plan contempla que los ciudadanos reserven alimentos y agua para al menos 10 días, además de aprovisionarse de medicamentos, energía y dinero en efectivo.

Es la primera vez desde la II guerra Mundial que el Ejecutivo recurre a una medida de este tipo y el adelanto de su contenido en medios de comunicación está causando cierta inquietud en la población.

Por otra parte, el nuevo plan de emergencia del Gobierno de Merkel contempla también medidas excepcionales como la reintroducción en situaciones críticas del servicio militar obligatorio, eliminado hace cinco años. Esta posibilidad forma parte del nuevo concepto de defensa civil que el consejo de ministros alemán estudiará.

El plan, elaborado por el Ministerio de Interior, sugiere la reactivación del servicio militar en circunstancias extraordinarias y el "apoyo a las fuerzas de combate" por parte de civiles en el caso de que Alemania, dentro de un operativo de la OTAN, deba defender sus fronteras.

Asimismo, la iniciativa contempla el apoyo obligado de la ciudadanía al ejército en cuestiones logística, del aporte de vehículos y combustible a disposición de instalaciones y avituallamiento.

Además, el nuevo concepto de defensa civil incluye, de nuevo en casos de emergencia, la colaboración obligatoria de empresas privadas en la edificación de infraestructuras clave para el ejército.

El Gobierno alemán eliminó el servicio militar obligatorio en julio de 2011, tras 55 años de vigencia de esta medida, al no entenderlo más como un elemento necesario para el ejército o la seguridad nacional.

No obstante, la reintroducción del servicio militar obligatorio sería un procedimiento legalmente sencillo, ya que esta prestación está recogida en la constitución.

El Gobierno alemán se plantea actualizar su concepto de defensa civil apenas un mes después de los dos primeros ataques yihadistas perpetrados en el país, en los que murieron los terroristas y una veintena de personas resultaron heridas.