La guardia costera griega lleva a cabo hoy una operación de rescate de cerca de 700 migrantes que viajaban en una embarcación a la deriva a 75 millas náuticas al sur de la localidad cretense de Kalí Limeni, en aguas internacionales.

Los guardacostas aseguraron a Efe haber hallado por el momento cuatro cadáveres, que 340 migrantes ya están a salvo y que las buenas condiciones meteorológicas ayudan en las tareas de rescate.

En la embarcación, de 25 metros de eslora, que según las autoridades podría tratarse de un barco de pesca, había entre 600 y 700 migrantes.

Además de dos barcos enviado por los guardacostas helenos, cinco embarcaciones civiles más que se encontraban en la zona están ayudando en las tareas de salvamento, para las que además Grecia ha desplazado un helicóptero Super Puma y un avión.

Se sospecha que la embarcación había salido del norte de África y su destino era Italia, pues llegada del buen tiempo reactivó la ruta desde Libia a Europa. En los últimos meses han llegado a Creta unos 220 refugiados, según la prensa local.