Un turista estadounidense murió este martes y otras diez personas resultaron heridas en un ataque a puñaladas perpetrado por un palestino en el paseo marítimo de Tel Aviv, donde el agresor fue abatido por las fuerzas israelíes de seguridad.
La víctima mortal fue identificada por los medios locales como un turista de nacionalidad estadounidense de 29 años, mientras que entre los heridos han sido identificados dos miembros de la minoría árabe, informó la portavoz policial Luba Samri.
Del resto de las víctimas no ha trascendido información.
El agresor, un joven de 22 años natural de la localidad de Qalqilia, en el territorio ocupado de Cisjordania, había entrado en Israel sin permiso de las autoridades, dijo el alcalde de Tel Aviv, Ron Juldaí.
Los hechos se produjeron alrededor de las 18.00 hora local (16.00 GMT), cuando la policía israelí recibió una llamada alertando de varios apuñalamientos en la zona turística del paseo marítimo de Yafo, en el sur de la ciudad y de población mixta judía y árabe.
"El sospechoso llegó desde el puerto de Yafo con dirección a la la Plaza del Reloj y comenzó a correr hacia el norte, apuñalando a cuatro transeúntes", informó la Policía en una nota de prensa.
Desde este punto, y según imágenes que han sido difundidas por medios locales, prosiguió su carrera por el paseo marítimo de Tel Aviv apuñalando a otras personas, hasta que un agente de la Policía le abatió.
Cuatro de los heridos presentan heridas de consideración, otros cuatro de carácter moderado y dos se encuentran en estado leve, según el parte médico oficial, y han sido trasladados a tres hospitales de la zona.
Los hechos ocurrieron a poco más de un kilómetro del Centro Peres de la Paz, donde a esa misma hora el expresidente israelí Shimón Peres recibía al vicepresidente estadounidense, Joe Biden, que acababa de comenzar una visita oficial a la región.
El de Tel Aviv es el cuarto ataque palestino de la jornada, una de las más violentas de las últimas semanas, aunque el jefe de la Policía, Roni Elshej, ha asegurado que "no hay conexión entre ellos".
Tan sólo una hora antes, en Jerusalén Este, dos policías israelíes habían resultado heridos de gravedad por disparos de un palestino, también muerto en un intenso tiroteo con otros agentes en la popular calle Saladino de Jerusalén Este.
Poco antes de ese suceso, otro palestino moría cuando apuñaló e hirió a un judío ultraortodoxo en una tienda de licores de la ciudad de Petaj Tikva, al noreste de Tel Aviv.
La víctima y el propietario de la tienda forcejearon con el atacante hasta darle muerte.
Por la mañana, también en Jerusalén este, una palestina en la cincuentena fue abatida y muerta por disparos de agentes de seguridad israelíes tras sacar un puñal al acercarse a ellos y tratar de apuñalarlos sin éxito, según fuentes policiales israelíes.
Los sucesos se enmarcan en la actual ola de violencia y de ataques palestinos contra israelíes que tienen lugar desde el pasado mes de octubre y en los que han muerto 30 israelíes, tres extranjeros -el de hoy es el segundo estadounidense- y un palestino.
En este período han resultado muertos también 190 palestinos, dos tercios de ellos abatidos al perpetrar o intentar cometer ataques (confirmados o supuestos) y el resto en enfrentamientos con las fuerzas de seguridad israelíes.
