Las fuerzas de seguridad del estado federal alemán Baviera rebajaron la alerta terrorista y descartaron un riesgo inminente de atentado en la ciudad de Múnich, informó el titular de Interior del estado

En dos comparecencias separadas ante la prensa, el ministro y el jefe de la policía de Múnich, Hubertus Andrä, compararon la situación de seguridad en Múnich tras la alerta terrorista de anoche, que obligó a evacuar dos estaciones, a la que había tras los atentados yihadistas de París del 13 de noviembre pasado.

Aunque reconoció que el nivel elevado de amenaza terrorista continua vigente en Europa, "no existen indicios concretos" de peligro de atentado, "ni hoy ni mañana ni en ningún lugar determinado" de la capital bávara, afirmó Herrmann.

La organización terrorista Estado Islámico (EI) tenía planificado perpetrar un atentado suicida en Múnich (sur de Alemania) durante la nochevieja, informó el ministro de Interior del estado federado de Baviera, Joachim Hermann.

La Oficina Federal de lo Criminal (BKA) informó durante la noche a las autoridades bávaras de que había indicios fuertes en ese sentido provenientes de informaciones de servicios secretos amigos, dijo Hermann en conferencia de prensa en la madrugada de hoy.

El jefe de la policía de Múnich, Hubertus Andrä, por su parte, indicó que el atentado suicida debía ser perpetrado por un comando de entre cinco y siete hombres.

Sin embargo, los controles policiales hasta ahora no han dado resultado alguno ni se han producido detenciones.

Hermann dijo que las informaciones recibidas eran de tal peso que, pese a no ser seguras en un ciento por ciento, no podían ser ignoradas por lo que se tomaron medidas inmediadas.

Por ello se ordenó la evacuación de la estación central de Múnich así como de la estación del barrio de Passing y se recomendó a la gente que evitase las aglomeraciones indicando que al no poder acceder a sus objetivos originales los terroristas podrían actuar en otra parte.

Hermann comparó la situación con la que se vivió hace pocas semanas en Hannover donde un partido de fútbol entre Alemania y Holanda tuvo que cancelerarse debido a la amenaza terrorista.

"Todavía espero que esta noche termine en paz", dijo Hermann.