Abdelhamid Abaaoud y otro yihadista muerto junto a él en el asalto de la policía francesa a un apartamento de Saint Denis el pasado miércoles programaban cometer un atentado suicida en La Defense, el barrio financiero de París, según indicó este martes el fiscal de París, François Molins.

El atentado de La Defense se debía haber cometido el mismo día del asalto al apartamento de Saint Denis o al día siguiente, explicó en conferencia de prensa Molins, que no quiso dar muchos detalles y se limitó a precisar que tenían dos chalecos explosivos.

El ADN de Abaaoud y el de ese hombre, al que no se ha identificado por ahora, estaba en los kalachnikov encontrados en el coche que utilizó el llamado "comando de las terrazas" que la noche del pasado día 13 fue el responsable de tiroteos en varios bares y restaurantes al este de la plaza de la República de París, que causaron 40 muertos y decenas de heridos.

El fiscal señaló que los elementos disponibles apuntan a que el comando estaba formado por ellos dos y por Brahim Abdeslam, que se hizo saltar por los aires con un chaleco de explosivos poco después de esos tiroteos a poca distancia, en un bar del bulevar Voltaire.

El hermano de Brahim, Salah Abdeslam, según los elementos recopilados hasta ahora por los investigadores, se encargó de conducir a los tres terroristas suicidas que detonaron sus chalecos de explosivos en las afueras del Estadio de Francia donde se disputaba el partido amistoso Francia-Alemania.

Su ADN estaba en el Renault Clio -en particular en la llave- que se cree que se utilizó para llevar a esos tres yihadistas, y que apareció abandonado no lejos de allí, en el distrito XVIII de París.

El fiscal indicó que se baraja la hipótesis de que Salah Abdeslam tuviera también un chaleco de explosivos, puesto que este lunes se encontró uno en la ciudad de Montrouge, al sur de París, en una zona donde se había detectado el móvil del terrorista en la noche de los atentados.

De hecho, también se cree que estaba encargado de otro atentado en el mismo distrito XVIII de París, que aparecía en el comunicado del Estado Islámico (EI) en el que la organización terrorista reivindicaba, pero que no se perpetró, por razones que no se conocen.

Salah Abdeslam es objeto de una orden de busca y captura internacional lanzada por Francia.

Molins no quiso precisar ni el número ni la identidad de los presuntos terroristas o cómplices a los que se está buscando. Seis magistrados antiterroristas se encargan del procedimiento abierto por la Fiscalía por diversos cargos, incluidos los de asesinato, tentativa de asesinato y secuestro.

Además, el fiscal de París consideró este martes "probable" que uno de los yihadistas que participó en los atentados de París del día 13, y que no ha sido identificado, muriera el pasado miércoles en el asalto policial a un apartamento en Saint Denis.

Los investigadores no han podido todavía identificar a este individuo -que no estaba fichado en Francia-, que accionó su chaleco de explosivos durante el asalto, pero su ADN fue encontrado en uno de los fusiles Kalachnikov utilizados presuntamente por el comando que procedió a varios tiroteos en terrazas de bares del centro de París.

Un piso con armas y explosivos

Por otro lado, la policía francesa descubrió este martes 1 kilo de explosivos y armas en un apartamento de la localidad de Saint-Ouen, en la periferia norte de París, según informó el diario "Le Parisien".

Durante la operación, los agentes hallaron dos paquetes de explosivos de 500 gramos cada uno y se incautaron de detonadores eléctricos y de granadas defensivas, agregó esa cabecera.

El registro se produjo el mismo día en el que las fuerzas del orden examinaron los locales de la asociación de Artigat, en el sur de Francia, que dirige Olivier Corel, el imán salafista francés de origen sirio conocido como "el emir blanco" y relacionado con varios yihadistas de los alrededores de Toulouse.