La policía alemana confirmó este jueves que el cadáver de un niño hallado en el maletero de un automóvil corresponde al de un refugiado bosnio de cuatro años, presuntamente secuestrado hace cuatro semanas en Berlín por un hombre de 32 años, que ya ha sido detenido.

El niño, conocido como Mohamed, había sido visto vivo por última vez en el centro de registro de peticionarios de asilo de Berlín, el 1 de octubre, cuando fueron captadas por las cámaras de vídeo imágenes del menor de la mano de un adulto desconocido que se lo llevaba del lugar.

La Fiscalía de Berlín puso en marcha un amplio dispositivo de búsqueda, con la difusión de esas imágenes y una foto del niño.

Finalmente hoy fue localizado el sospechoso, después de que su propia madre se pusiera en contacto con la policía asegurando que su hijo le había confesado ser el autor del secuestro.

Las circunstancias exactas de la muerte del menor están aún por establecer, indicaron las fuentes policiales, según las cuales el fallecimiento no se produjo "ni hoy ni ayer", sino "hace un tiempo".

La policía parte de la base de que el detenido, sin antecedentes penales, actuó en solitario y no se le conocen vínculos con grupos ultraderechistas.

La detención se produjo en Jüteburg, en el "land" de Brandeburgo (circundante de Berlín), en la vivienda de la madre.

El sospechoso, quien no opuso resistencia, se confesó autor del secuestro y se mostró en todo momento "cooperativo", según la fuente policial.

El pequeño Mohamed se encontraba con su madre y sus hermanos en el centro de registro de peticionarios de asilo de Berlín cuando desapareció.

La familia, originaria de Bosnia-Herzegovina, reside desde hace dos años en Alemania y acudía a ese centro para regularizar su situación.

La difusión de la foto del niño y las imágenes captadas por el vídeo llenaron durante días los medios alemanes, coincidiendo con la llegada masiva de nuevos refugiados y la situación de desbordamiento administrativo que se vive tanto en Berlín como en el resto de Alemania.

Se solicitó la colaboración ciudadana para su búsqueda y se ofreció una recompensa de 20.000 euros a quien diera pistas fundamentadas sobre su paradero.

Hasta hoy se habían recibido 350 informaciones relacionadas con Mohamed, hasta que finalmente hoy se produjo la de la madre del sospechoso.