Los milicianos kurdos repelieron hoy varios intentos del grupo yihadista Estado Islámico (EI) de avanzar hacia el centro de la ciudad kurdo siria de Kobani, en la frontera con Turquía, donde se libra una batalla calle a calle.

En esta jornada, ambos bandos se enfrentaron en el suroeste, sureste y este de la población, declaró a Efe por vía telefónica el viceministro de Asuntos Exteriores del Gobierno autónomo de Kobani, Idris Nuaman.

"Los yihadistas trataron de progresar por esas zonas pero las Unidades de Protección del Pueblo kurdo se lo han impedido", dijo el responsable.

Dentro de la localidad, los radicales tienen en sus manos los barrios de Kani Arabane y Meqtel, en el este, y buscan dirigirse hacia el centro desde la calle 48, que divide Kobani en dos mitades -la oriental y occidental-, aunque sus adversarios están resistiendo.

El Observatorio Sirio de Derechos Humanos agregó que la pasada madrugada los extremistas intentaron alcanzar la plaza de la Libertad, en el corazón de Kobani, pero que quienes defienden la localidad se lo impidieron.

Por el suroeste, los milicianos kurdos ganaron hoy terreno en la carretera que conduce a Alepo y frustraron un atentado que el EI iba a perpetrar con un coche bomba, porque dispararon contra el vehículo antes de que llegara a su objetivo por lo que estalló antes de tiempo, dijo Nuaman.

En las afueras, hay choques desde ayer al noreste de la urbe, donde los yihadistas quieren tomar el paso fronterizo principal entre Kobani y Turquía; y al oeste, donde los combates se producen a unos dos kilómetros.

El responsable de la Defensa de Kobani, Esmat Sheij Hasan, indicó a Efe en una conversación telefónica que "esta es una batalla que se está librando calle a calle".

Hasan lamentó la inferioridad de medios de que disponen los kurdos frente a los extremistas, que cuentan con carros de combate y armas pesadas.

"Estamos completamente cercados menos por el norte, no podemos recibir refuerzos ni de hombres ni de armamento, y lo único que ha entrado a través de Turquía son jóvenes voluntarios kurdos que apenas tienen experiencia militar", se quejó.

En cambio, el EI ha traído municiones, armas y combatientes desde otras áreas rurales de Alepo, provincia donde se ubica Kobani, y desde Al Raqa, su bastión principal en Siria.

Hasan, presidente del Organismo Autónomo de Defensa y Protección de Kobani, alertó de una posible "masacre" de kurdos si los radicales se hacen con el dominio total e hizo un llamamiento a la ONU y la comunidad internacional para que actúen.

El EI inició su ofensiva contra Kobani el pasado 16 de septiembre y su avance ha sido constante pese a los bombardeos de la coalición internacional liderada por EEUU, que hoy atacó objetivos de los yihadistas en una carretera al sureste de la ciudad, dijo Nuaman.

Desde esa fecha, según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos, al menos 554 personas han muerto: Veinte civiles, 298 miembros del EI y 236 milicianos kurdos y rebeldes que los apoyan.

Este sábado, al menos veintitrés integrantes del EI perdieron la vida en ataques de sus oponentes en el oeste de la ciudad.

Ayer, el Observatorio afirmó que el 40 % de Kobani estaba bajo el control de los extremistas, pero Nuaman rebajó hoy ese porcentaje y aseguró que el EI no tiene en sus manos más del 25 o 30 % de la localidad.

Kobani es uno de los tres principales enclaves kurdos de Siria junto a las regiones de Afrín, también en Alepo, y Al Yazira, en Al Hasaka.

Desde el comienzo del asalto del EI, la población está completamente rodeada por los radicales, excepto por el norte, donde limita con Turquía, hacia donde se ha dirigido el éxodo de refugiados kurdo-sirios que han abandonado sus hogares.

Turquía sufre una gran presión interna y ha sido escenario esta semana de protestas de kurdos, que han dejado decenas de muertos, para que intervenga militarmente en el territorio sirio para frenar al EI; algo que rechaza rotundamente el Gobierno de Damasco que ha advertido de que lo considerará como un acto de agresión.

El Gobierno turco condiciona su adhesión a la coalición antiyihadista promovida por Estados Unidos a la creación de una zona de exclusión aérea en Siria y a la puesta en marcha de un plan para entrenar y equipar a los grupos rebeldes sirios contra los islamistas.

El jueves, la ONU pidió públicamente al Ejecutivo turco que permitiera la entrada en Siria de combatientes kurdos y armamento para defender Kobani, donde, según advirtió, podría producirse una matanza de civiles.