El presidente venezolano, Nicolás Maduro, ha anunciado que activará "comandos populares antigolpes", que estarán integrados por todos los sectores de la población, con el objetivo de "derrotar el golpe fascista con el pueblo movilizado y organizado".
"Alerta los comando antigolpe populares en cada fábrica, en cada centro de trabajo, en cada barrio, en cada universidad, vamos a derrotar el golpe fascista con el pueblo movilizado y organizado", ha concretado el mandatario durante su discurso en el Palacio de Miraflores, donde se ha reunido con trabajadores agredidos por grupos opositores.
El jefe de Estado venezolano ha explicado que se trata de una "fórmula mágica" ideada por el difunto presidente venezolano Hugo Chávez. "El Comando Nacional Antigolpe lleva una propuesta. Estoy seguro que la asumiremos y vamos a conformar los Comandos Populares Antigolpe en todo el país. Es la fórmula mágica del comandante Hugo Chávez", ha sentenciado.
Asimismo, el presidente ha convocado a una "monumental marcha" de mujeres, que tendrá lugar este sábado en las ciudades de Valencia, Maracaibo, Barquisimeto, Barcelona, Puerto Ordaz y Caracas, según informan los medios locales.
Un nuevo muerto
El presidente venezolano, Nicolás Maduro, informó de una nueva muerte relacionada con las protestas que se viven desde más de una semana, y aclaró que un obrero que se había dado por muerto en una marcha oficialista sobrevivió y está grave, por lo que se mantienen en seis la cifra de víctimas.
Explicó que el obrero de la estatal Siderúrgica del Orinoco (Sidor) al que se dio muerto tras ser tiroteado en una marcha a favor del Gobierno en una ciudad del oeste de Venezuela sobrevivió aunque está "gravemente herido".
Con estos datos se mantiene en seis el número de muertos en el país en manifestaciones que se han repetido desde que el pasado día 12 una manifestación pacífica de estudiantes y opositores derivara en actos de violencia en los que fallecieron tres jóvenes y decenas de personas más resultaron heridas y detenidas.
El Gobierno afirma que detrás de las protestas existe la injerencia de países como Estados Unidos en un supuesto intento de desestabilización en el país, mientras que la oposición acusa al chavismo de "infiltrar" grupos armados dedicados a generar violencia.
