Francia y Reino Unido han convocado a los embajadores de Israel en sus respectivos países para manifestarles su desacuerdo con el anuncio del Gobierno israelí de la construcción de 3.000 nuevos asentamientos en Cisjordania, especialmente en la zona denominada E1, con lo que se parte 'de facto' en dos Cisjordania.

"El embajador ha sido convocado para comunicarle nuestra desaprobación", ha explicado el portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores francés Philippe Lalliot. La Embajada israelí en París también ha confirmado esta información.

El Ministerio de Asuntos Exteriores británico, por su parte, ha informado a través de su cuenta en Twitter de que "el embajador israelí en Londres, Daniel Taub, ha sido convocado oficialmente al Ministerio de Asuntos Exteriores esta mañana por el ministro Alistair Burt".

"Condenamos la reciente decisión del Gobierno israelí de construir 3.000 nuevas viviendas y reactivar el desarrollo del bloque E1", señala el Ministerio de Exteriores británico. Esta medida "amenaza la viabilidad de la solución de los dos estados". "Hemos instado al Gobierno israelí a dar marcha atrás a esta decisión", añade.

Francia y Reino Unido condenaron este pasado sábado el plan de Israel de ampliar los asentamientos de Cisjordania y advirtieron de que esta medida socavará la confianza de la comunidad internacional en su deseo de lograr la paz con los palestinos.

Tras la votación de la Asamblea General de Naciones Unidas que otorgó a Palestina el pasado jueves el rango de Estado observador no miembro, Israel anunció que construiría más viviendas en la Cisjordania ocupada y la confiscación de los salarios de funcionarios palestinos por valor de unos 94 millones de euros. En la votación, Francia votó a favor y Reino Unido se abstuvo.