El enviado especial de la ONU y la Liga Arabe para Siria, Kofi Annan, pidió hoy al Consejo de Seguridad del organismo que actúe con "unidad" para contribuir al éxito de su mediación en la crisis que afecta a ese país árabe.

El ex secretario general de la ONU se dirigió por videoconferencia desde Ginebra al Consejo para pedirle "un mensaje de unidad y fortaleza" que permita un cambio en el rumbo del tratamiento de ese conflicto que ya dura un año, dijeron fuentes diplomáticas.

Annan se dirigió al máximo órgano de seguridad internacional para informarle de los resultados de las reuniones mantenidas el pasado fin de semana con el presidente sirio, Bachar Al Asad, en Damasco, y durante las que presentó propuestas concretas para superar la crisis.

En su discurso, Kofi Annan se refirió también a la necesidad de tratar el conflicto sirio con mucha cautela para evitar que se amplíe a toda la región.

"Tenemos que tratar la situación con mucho cuidado. Tendemos a centrarnos en Siria, pero cualquier cálculo mal hecho que conduzca a una escalada de la violencia con impacto en la región será extremadamente difícil de manejar", dijo Annan en rueda de prensa tras mantener una videoconferencia con el Consejo de Seguridad.

"La región está extremadamente preocupada por lo que ocurre en Siria, y su preocupación va más allá de Siria porque la crisis puede tener impacto en toda la región si no se afronta de forma efectiva", agregó Annan.

"He compartido con el Consejo de Seguridad las consultas que he mantenido en Siria y los llamamientos que he estado haciendo por todo el mundo para asegurar que hay un apoyo sólido a la misión y todos estamos de acuerdo en un proceso de mediación", aseveró.

El ex secretario general de la ONU hizo especial hincapié en recordar que la región donde se sitúa Siria "ha vivido acontecimientos dramáticos", por lo que pidió tiempo para poder resolver la crisis.

"El tiempo siempre es un factor en las negociaciones. Cada crisis tiene sus especificidades. Lo que es importante para nosotros es asegurar que la otra parte se compromete seriamente. Creo que mientras las discusiones y las conversaciones sean significativas, hay que continuarlas", afirmó.

Annan anunció que ha designado a un grupo de trabajo que volverá este fin de semana a Damasco para proseguir las conversaciones con el gobierno sirio.

"En el momento adecuado, cuando se haya conseguido un progreso suficiente, yo estaré preparado para volver a la región", subrayó.

Annan declinó explicar si ha habido avances en algún ámbito tras su entrevista el fin de semana pasado en Damasco con el presidente sirio, Bachar al Asad, y varios de sus ministros, y sólo se limitó a decir que este se mostró "receptivo y correcto".

El enviado especial recordó que ha hecho tres peticiones muy concretas a Asad: acabar con el baño de sangre; establecer conversaciones políticas creíbles; y permitir el acceso humanitario al país, aunque no quiso precisar si ha obtenido respuesta a alguna de ellas.

Precisamente, cuestionado sobre la legitimidad y eficacia que puede tener la misión de evaluación que la ONU va a llevar a cabo este fin de semana para determinar las necesidades humanitarias en el país dado que está controlada por el gobierno sirio, Annan afirmó que "es la única manera", dado que es el ejecutivo "quien controla el territorio".