El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, ha calificado el asalto realizado ayer por manifestantes egipcios contra la Embajada israelí en El Cairo como un "grave incidente" que no ha pasado a mayores gracias a la cooperación del presidente de Estados Unidos, Barack Obama, y a la actuación de los servicios de Inteligencia.

"El ataque de la turba contra la Embajada es un grave incidente pero podría haber sido peor si los responsables de los disturbios hubieran entrado por la última puerta y hubieran agredido a nuestro personal", explicó.

La emisora israelí Israel Radio ha confirmado este sábado que tanto el embajador israelí en El Cairo, Yitzhak Levanon, como la práctica totalidad del personal de la Embajada fueron evacuados del país a raíz de los disturbios frente al edificio diplomático, que se han saldado con un fallecido y casi 500 heridos.

Los manifestantes destruyeron el muro de protección del edificio que alberga a la Embajada, entraron en el recinto y saquearon varias habitaciones de la misión diplomática, aunque no entraron en la sala donde se encontraba atrincherado el personal diplomático.

"Estoy encantado de que hayamos podido evitar un desastre y quería agradecer su ayuda al presidente Obama, así como felicitar a todos los agentes de Inteligencia que colaboraron en el rescate por la excelente labor realizada", afirmó en comentarios recogidos por el diario hebreo 'Yedioth Aharonoth'.