El ministro de Exteriores de Australia, Kevin Rudd, indicó hoy que su país presta ayuda consular al fundador del portal WikiLeaks, el australiano Julian Assange, tras su detención en Londres.

La embajada australiana en el Reino Unido se puso en contacto en Assange tras su comparecencia ayer ante el juez por una orden de extradición emitida por las autoridades suecas a causa de un presunto delito de acoso sexual.

Rudd, quien ha calificado de "irresponsable" a Assange por la publicación de miles de cables diplomáticos que comprometen la diplomacia estadounidense, indicó que se le prestará asistencia consular "como a cualquier otro ciudadano australiano".

El fundador de WikiLeaks, de 39 años, se entregó ayer las autoridades británicas para declararse inocente de los cargos, tras ser denunciado el pasado agosto.

Sin embargo, Assange acusó a las autoridades australianas de colaborar con Estados Unidos y de querer "matar al mensajero" para ocultar la verdad, en un artículo publicado hoy en el diario "The Australian".

En ese artículo Assange dice que "WikiLeaks tiene cuatro años de historia. Durante ese tiempo hemos cambiado gobiernos, pero ni una sola persona, que se sepa de momento, ha resultado dañada".

"Pero EEUU, con la connivencia del Gobierno australiano, ha matado a miles de personas sólo en los pasados meses", añade en su escrito el fundado de la polémica web.

Por su parte, el ex primer ministro John Howard, quien durante su mandato decidió que Australia formara parte de la alianza militar que invadió Irak con Estados Unidos al frente, indicó que la detención de Assange no está relacionada con la publicación de las filtraciones.

"Espero que el Gobierno australiano pedirá para él (Assange) que sea tratado como cualquier otro extranjero en esa situación y que le preste la asistencia a la que tiene derecho", dijo Howard a la cadena australiana de radio ABC.

El ex líder conservador rebatió que el Gobierno australiano se haya despreocupado por la situación de Assange.

"Ningún australiano fuera de su país puede esperar ser objeto de una protección especial bajo la legislación de Australia cuando está en el extranjero", agregó Howard.

Algunos de los cables publicados por WikiLeaks pueden perjudicar las relaciones entre Australia y China, países que se han esforzado en los últimos años en fortalecer su colaboración económica y política en los últimos años.

Según el ex primer ministro australiano, Assange no ha cometido ninguna falta por el hecho de que WekiLeaks haya publicado cables que contenían "comentarios con franqueza".

"Todo periodista publicará información confidencial si la obtiene, sujeta únicamente a concluyentes intereses en materia de seguridad nacional", señaló.

La publicación de cientos de informes diplomáticos estadounidenses ha puesto en evidencia a este país y a muchos de sus aliados y ha revelado informaciones controvertidas sobre Afganistán, China, Corea del Norte, Yemen o Arabia Saudí.