La familia de Paloma Gálvez, la malagueña de 69 años desaparecida y previsiblemente fallecida en el naufragio de un barco en el Sur de Turquía, se personará en la causa judicial abierta "para exigir la depuración de posibles responsabilidades", han informado hoy a Efe fuentes de su despacho de abogados.

Los familiares han designado al bufete Martínez-Echevarría, Pérez y Ferrero para agilizar los trámites, que serán tramitados por el socio de este despacho Ignacio Gordillo, fiscal de la Audiencia Nacional en excedencia, que tiene "mucha experiencia en temas internacionales", según las citadas fuentes.

El regreso de los familiares desde Turquía podría comenzar a lo largo de la jornada de hoy, aunque algunos permanecerán en ese país para formalizar los trámites necesarios.

Este bufete también ha gestionado la obtención de salvoconductos que permitan la salida de Turquía a los familiares, que perdieron su documentación en el naufragio, y tramitará el expediente para certificar judicialmente la defunción de Paloma Gálvez.

Las fuentes han apuntado que todavía no se han producido inmersiones en el lugar del siniestro para intentar localizar el cuerpo de la mujer, que al parecer se hundió con la embarcación en la que viajaba con diecisiete familiares.

Ignacio Gordillo ha señalado en un comunicado de su bufete que "a la situación dramática que supone una muerte en estas circunstancias, se le añade la complejidad jurídica que supone un naufragio en un país extranjero".

Por su parte, el resto de los turistas españoles, hasta 17, que sobrevivieron podrán regresar a sus casas a partir de este viernes si así lo desean, después de que reciban salvoconductos para abandonar ese país, ya que perdieron toda su documentación en el accidente, ha informado a Europa Press una portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores y de Cooperación.

El departamento que dirige Miguel Angel Moratinos no ha podido precisar cuántos de ellos regresarán a España ya que se trata de una decisión "personal". Algunos de los turistas son familiares de la malagueña Paloma Gálvez Petersen, de 69 años, que sigue desaparecida tras el accidente y a la que busca un dispositivo turco.

El barco 'Kayhan-9' en el que viajaban cubría el recorrido entre Mármaris y Fethiye, en el suroeste del país. En su interior se declaró un incendio por causas aún desconocidas. Los servicios de guardacostas pudieron sofocar el incendio y rescatar a los cinco tripulantes y todos los turistas españoles, salvo a la mujer desaparecida, Paloma Gálvez Petersen, una de las propietarias de la Clínica Gálvez de la capital malagueña, que viajaba acompañada por dos hermanos y otros familiares.