La publicación ayer por el diario "El País" de una serie de fotografías de las compañías femeninas de Silvio Berlusconi en su Villa Certosa, la mansión que el primer ministro de Italia posee en Porto Rotondo, en la isla de Cerdeña, provocó conmoción en Italia. El reportero Antonello Zappadu tomó en los dos últimos años cientos de instantáneas de la casona sarda de Berlusconi, imágenes que fueron secuestradas por la fiscalía italiana a finales de mayo.

En las escenas, recogidas por Zappadu en agosto de 2008 y publicadas ayer, se puede ver claramente a Berlusconi en su residencia junto con algunas jóvenes. Otras imágenes captan momentos en que otras toman el sol en "top less" junto a la piscina, e incluso se puede observar a un hombre desnudo que se dispone a recoger una toalla del suelo y que resultó ser el ex primer ministro checo Mirek Topolanek, quien ayer reconoció ser él aunque dijo que eran un montaje.

Berlusconi denunció días atrás a Zapaddu al Defensor de la Privacidad y a la fiscalía por violación de la intimidad e intento de estafa en relación las imágenes tras conocerse que el fotógrafo intentó venderlas a la revista Panorama, publicación vinculada a una de las empresas editoriales del primer ministro. A finales de mayo la Fiscalía de Roma secuestró el archivo fotográfico de Zappadu, algunas de cuyas fotos publicó ayer el periódico, y que hasta la fecha estaban ocultas a la opinión pública.

Berlusconi dijo ayer que "no hay ningún escándalo" en esas fotos, pero que se trata de imágenes tomadas en su residencia de Cerdeña y ello supone "una violación de la intimidad y una agresión escandalosa". Para Berlusconi se trata de fotos "inocentes". "Yo recibí a una delegación de la República Checa y no es posible que una persona a un kilómetro de distancia se entrometa y tome fotos del interior de una casa. El derecho a la intimidad debe de ser tutelado y, sobre todo, en presencia de huéspedes ilustres", refirió.

Preguntado sobre el "top less" de las chicas que aparecen en las fotos, Berlusconi se limitó a responder al entrevistador: "¿Es qué usted se ducha vestido?".

"Estas chicas -mantuvo- se están bañando en un jacuzzi privado en el interior de una casa destinada a los huéspedes y han sido agredidas de forma escandalosa".

Su abogado, Nicolò Gheddini, dijo que interpondrá una demanda contra el diario español y el organismo italiano para la protección de la privacidad afirmó que el periódico "no ha respetado la intimidad del primer ministro de Italia.