Amnistía Internacional denunció ayer la ayuda militar de EE UU a Israel, acusó tanto a este país como a Hamás de utilizar armas traídas de fuera contra civiles y pidió a la ONU que imponga un embargo total de material bélico.
"Las fuerzas israelíes emplearon fósforo blanco y otras armas suministradas por EE UU para cometer crímenes de guerra y otras violaciones graves del derecho internacional humanitario", denuncia AI en un comunicado.
"Cientos de niños, entre otros civiles, perdieron la vida como consecuencia de los ataques, que también causaron la destrucción masiva de viviendas e infraestructuras", afirma Donatella Rovera, que presidió la delegación de AI que viajó a la zona. "Hamás y otros grupos armados palestinos lanzaron cientos de cohetes introducidos de contrabando o fabricados en zonas civiles de Israel con piezas procedentes del extranjero", agrega.
"Aunque la capacidad letal de esos misiles "es muy inferior" a la del armamento israelí, su uso ha causado la muerte de varios civiles y constituye también un crimen de guerra", añade AI.
Para la ONG, "quienes armaron a los dos bandos tenían perfecto conocimiento del uso indebido (...) por lo que deben asumir su parte de responsabilidad ".
Tras los combates, AI halló en Gaza piezas de municiones de Israel en colegios, hospitales y casas. También fragmentos de fósforo blanco, muy incendiario, aún en llamas.
Por su parte, Israel tachó esta investigación de "versión sesgada de los acontecimientos".
El informe enumera a todos los países que han exportado armas a Israel e incluye a España. De 2004 a 2007, las ventas españolas de material de defensa a Israel superaron los 2,2 millones de euros, con lo que España se convierte en el octavo exportador mundial de armas a ese país.
AI pide al Gobierno español que no autorice exportaciones de armas a ese país y al jefe de Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, que traslade el martes a su homóloga de EE UU, Hillary Clinton, que la próxima semana visitará Israel y a la ANP, una petición para que Washington revise sus acuerdos militares con Israel.
Livni y Barak dicen "no" a un tripartito con Netanyahu
El líder del conservador Likud, Benjamín Netanyahu, encargado de formar Gobierno en Israel, no ha logrado convencer, en sus primeros contactos, al laborista Ehud Barak ni a la centrista Tzipi Livni para unirse a su Ejecutivo.
Así, Barak transmitió ayer a Netanyahu su plan de pasar a la oposición, lo mismo que anteanoche le dijo Livni.
Netanyahu apela a los retos de un Irán nuclear o la actual crisis para convencer a sus interlocutores, pero Livni no claudica en la visión de dos Estados para resolver el conflicto palestino-israelí.
